El evangelio de Juan es uno de los 4 evangelios que narran la vida de Jesús, donde encontramos principalmente su nacimiento, su ministerio, su crucifixión, y su resurrección. Aun cuando el nombre del autor no figura en el evangelio, la tradición de la iglesia primitiva se lo atribuye al apóstol Juan, quien a su vez se refiere a si mismo como el discípulo “al cual Jesús amaba” (13:23; 19:26; 20:2; 21:7,20).
El propósito que tenía Juan de narrar la vida de Jesús era bien claro “….para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre” (Juan 21:31). Por lo que Juan en todo el libro dice “Jesús es el Cristo” es decir el “Ungido”, que en su paralelo hebreo sería “Jesús es el Mesías”, en Quien hay vida eterna, y de Quien hablaron los profetas tiempo atrás.
Resumen del Libro
La narración de este libro se divide en dos bloques principales, primeramente, la narración del nacimiento y ministerio de Jesús, donde Juan expone la deidad de Jesús y la controversía que esto genera con los lideres judios, y en segunda instancia la noche intima que Jesús tiene con sus discípulos previo a la traición de Judas.
En el principio de la narración, y a diferencia de los evangelios de Mateo y Lucas, Juan comienza su narración no desde el nacimiento de Jesús, sino de la misma gloria, cuando dice “…y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios” (Juan 1:4). De hecho, son palabras parecidas a las que Jesús pronuncia en capítulo 17 cuando dice “glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese” (Juan 17:6). Otra versión de la biblia dice “Ahora, Padre, llévame a la gloria que compartíamos antes de que comenzara el mundo”. Desde aquí mismo parte Juan su relato, el cual es sencillamente magnífico.
También vemos que Juan no narra sobre un Jesús interesado en ocultar quien es, sino más bien en un Jesús que vino a testificar Quien es. Al sumo sacerdote le dice “…Yo públicamente he hablado al mundo; siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo (Juan 7:14,28), donde se reúnen todos los judíos, y nada he hablado en oculto” (Juan 18:20) y a Pilato le dice ““Yo para esto he nacido, y para esto he venido al mundo, para dar testimonio a la verdad…” (Juan 18:37). Y de hecho Pilato le pregunta ¿Que es la verdad?, bueno la verdad es que Jesús es el Cristo, ÉL Hijo de Dios, Dios mismo y que puede dar vida eterna. Por lo tanto, Juan narra como Jesús habla directamente sobre su identidad, aunque esto no fuera ni entendido ni aceptado. Por lo que, en la narración, vemos que el anonimato de Jesús es una cosa totalmente inviable, Jesús no podía pasar inadvertido. Y un día caminando llama a Felipe, y éste va en búsqueda al parecer de un amigo, llamado Natanael, y Jesús al decirle todo lo que estaba haciendo y donde estaba justo antes de que Felipe fuera por Él, queda perplejo hasta el punto de decir “Tú eres el Hijo de Dios, el Rey de Israel” (Juan 1:49). Luego en una fiesta Su madre le dice que no hay vino en una boda, ¿Qué habrá querido decir Su madre en otras palabras? Jesús, teniendo compasión de todos, convierte el agua en vino (Juan 2:11). Posteriormente en Jerusalen en la fiesta de la Pascua Jesús hace muchas señales (Juan 2:23), y en capítulo 3 encontramos una conclución muy sensata de un religioso, que, al escuchar, y contemplar estas cosas y de seguro otras cosas más, le dice a Jesús de noche “…sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él” (Juan 3:2). Lo que esta diciendo en otras palabras este religioso, es “Tu eres un enviado de Dios, y Dios esta contigo sin duda alguna”, y de hecho Nicodemo no estaba para nada perdido con esta aseveración. De hecho, en Jerusalen, y tras todos estos eventos que EL Padre estaba haciendo por medio del Hijo (Juan 14:10), donde Juan solo Data la conversión del agua en vino, la sanación del paralitico de betsaida, y la alimentación de los 5.000, y tras abiertamente Jesús testificar que Él era el Cristo (Juan 5:24,36; 6:38-40, 42, 47), no solo se generaron controversias entre Jesús y los lideres religiosos quienes no aceptaban Su testimonio (Juan 5:18-47), y quienes además querian matarle (Juan 5:16), sino que el pueblo comenzó a preguntarse ¿Es este el Cristo? (Juan 6:14, 7:1,26,31), generandose una especie de división en el pueblo debido a esto (Juan 7:12,40-43).
Podemos apreciar, que Jesús no vino a esconder su identidad, más bien vino a dar testimonio de su identidad. Por lo tanto, los judios al contemplar todas las cosas, no les quedaba mas remedio que reconocerlo, sin embargo, nunca lo hicieron.
Y por último, una de las señales mas grandiosas hechas por Jesús, que demostraban una vez más su titulo de Cristo, de Ungido. Su amigo Lazaro, hermano de Marta y Maria había muerto, y en la interacción entre Marta y El Señor, “….Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto. 22 Mas también sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará. 23 Jesús le dijo: Tu hermano resucitará. 24 Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero. 25 Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. 26 Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto? 27 Le dijo: Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo”. Juan 11:21-26
Y El Señor, estando muy conmovido al visualizar la profunda aflicción que había causado la muerte de Lazaro, no solo en sus queridas Marta y Maria, sino también de los mismos judios. Hasta ese momento, ni Marta, ni Maria ni nadie pensaba que Jesús iba a resucitarlo, de hecho, todos pensaban que si hubiera llegado antes de que muriera (Juan 11:21, 32, 37), hubiera podido hacer algo por él, pero nadie de los que estuvieron allí pensó por momento alguno lo que Jesús sería capaz de hacer (Juan 11:39). De seguro que cuando Jesús dijo “Quitad la piedra…” la gran mayoria de personas pensó lo que Marta penso, “…Señor, hiede ya, porque es de cuatro días” (Juan 11:39), o sea para que quitar la piedra. ¿Qué habrá pasado por la mente de los que escucharon “…¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? (Juan 11:40)?
Después de esto, Jesús llama a Lazaro de la tumba, y tras las conclusiones obvias que todo el pueblo sacaría, los principales sacerdotes tramaron no solo matar a Jesús, sino también a Lazaro, ya que él era una prueba viva de que Él era el Mesías, y donde todos creerían en Él. (Juan 11:47-52).
Ahora la segunda parte de la narrativa se enfoca en la última noche de Jesús con Sus discipulos (Juan 13:1), donde Jesús continua señalandoles de manera mas intima que ÉL es el Cristo (Juan 16:26-28). Jesús les enseña el amor que deben tener unos con otros (Juan 13:31-35), les señala que alguien del grupo lo traicionaría (Juan 21:30), y también les revela que prontamente dejará el mundo, y que volverá al Padre que le envió (Juan 14:1-6, 28, 16:5, 27-28). Asimismo, Jesús les promete la venida del Espíritu Santo, Espiritu que los guiaría a toda la verdad, y por lo que conviene que Él se vaya (Juan 16:7). Les señala que Él es la fuente de vida, y del aborrecimiento próximo que ellos padecerán por causa de ÉL (Juan 15:18). Finalmente, en capitulo 16, y aún con los discursos, y obras milagrosas que Jesús hizo delante de ellos, y aún cuando los discipulos creyeron en ÉL, y lo reconocieron todo el tiempo que estuvieron con ÉL, aún no eran capaces de sobrellevar esta fe. Al final de su tiempo con ellos, Jesús les dice “…¿Ahora creéis? 32 He aquí la hora viene, y ha venido ya, en que seréis esparcidos cada uno por su lado, y me dejaréis solo…” Juan 16:31-32.
Antes de ir a la Cruz, Jesús da cuenta de su ministerio, “…he acabado la obra que me diste que hiciese”. ¿cuál obra? Jesus dice: “He manifestado tu nombre a los hombres que del mundo me diste (v6)…..porque las palabras que me diste, les he dado (v8)…. yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé (v12)…. Yo les he dado tu palabra (v14)….. 18 Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo (v18)”
Posterirmente a esta oración, El Señor es arrestado por medio de una traición, traición que ÉL ya había anticipado que ocurriría por mano de Judas, y donde se le interroga por manos de Anás, el Sumo Sacerdote. En aquel interrogatorio “..el sumo Sacerdote preguntó a Jesús acerca de sus discípulos y de su doctrina. 20 Jesús le respondió: Yo públicamente he hablado al mundo; siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo, donde se reúnen todos los judíos, y nada he hablado en oculto”. Asimismo, cuando pilato interrogo a Jesús vemos a Jesús escapando de lo que le había otorgado El Padre, “El sabía que tenia que morir”, y respondió “….Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí”. Jesús tanto al uno como al otro les dio respuestas con indicios claros de Su origen divino. Aún cuando Pilato trato de que la muerte de Jesús no pasará por Sus manos, dentro de las respuestas que los Judios le dieron a Pilato para que lo matará, se encuentra lo que ya no pueden no reconocer que Jesús les testifico “…Nosotros tenemos una ley, y según nuestra ley debe morir, porque se hizo a sí mismo Hijo de Dios” (Juan 19:7). Al decir esto, ellos reconocieron lo que Jesús les manifesto, pero no le creyeron. Acto seguido Pilato manda a crucificar Al Señor.
Luego de su muerte, Maria Magalena va a la tumba en donde le habían puesto, y al no ver que El Señor estaba allí, fue a deciselo a Sus discípulos. Pedro y el discípulo a quien Jesús amaba se precipitaron a la tumba, y cuando entraron no vieron a nadie, sino los lienzos y el sudario (Juan 20:6-7).
Finalmente, Jesús se manifiesta a Sus discípulos, y los envia al mundo, con el mismo propósito por el cual descendio al mundo, dar a conocer que ÉL es Señor, Cristo y Mesias, y quienes confien en Él, tienen vida en Su Nombre.
Aplicaciones
- ¿Crees el testimonio de Juan, de que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, quien vino a dar vida eterna? (Juan 20:30-31)
- ¿Has utilizado este evangelio para predicar a otras personas contándoles las obras que Jesús hizo, y las cuales probaron su identidad?
- Al predicar sobre la identidad de Jesús como Cristo, ¿descansas en que Sus ovejas oirán Su voz?
- ¿Estas conociendo más de Dios por medio de esta narración?
