El esposo cristiano ama a su esposa como Jesús ama a la iglesia
Ama a tu esposa como Cristo amó a la iglesia (Efesios 5:25–27)
Un esposo cristiano sigue el ejemplo de Jesús (5:25), quien amó a la iglesia. Jesús demostró su amor por la iglesia, entregándose a sí mismo cuando murió en la cruz para que podamos ser perdonados por Dios y estar vestidos de su perfecta justicia delante de Dios (5:26–27). Jesús amó a la iglesia incondicionalmente, aun cuando éramos sus enemigos (Romanos 5:8–10). Por supuesto, un esposo cristiano está dispuesto a entregar su vida protegiendo o defendiendo a su esposa. Pero más allá, debe entregar su vida día tras día sirviendo y cuidando de su esposa.
Ama a tu esposa como a ti mismo (Efesios 5:28–33)
Un esposo cristiano ama a su esposa como a sí mismo, porque amar a su esposa es amarse a sí mismo. Un marido y su esposa son unidos por Dios en una sola carne (5:28, 31). Cuando Dios formó a Eva y la trajo a Adán, tenemos un comentario divino que establece el patrón para el matrimonio: “Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne” (Génesis 2:24). Es natural y correcto que protegemos y cuidamos nuestros cuerpos (5:29). Jesucristo también ama a su Cuerpo—la iglesia (5:29–30). Igualmente, un esposo cristiano ama a su cuerpo—su esposa (5:33).
Ama a tu esposa siendo el líder de tu familia (1ª Timoteo 3:1–7)
Ser el líder (3:4) no quiere decir que es el dictador, tiránico o abusivo en su hablar o actuar. Al contrario, debe ser “sobrio, prudente, decoroso” (3:2). La palabra original que se traduce “gobierne” nos brinda la idea de liderar como ejemplo. En lo espiritual, debe ser un ejemplo para su familia en la iglesia. En lo económico, debe proveer por su familia, demostrando disciplina y sabiduría en manejar el dinero. Debe tomar cartas de todas las necesidades de su familia. Se hace responsable por el bienestar de su familia.
Ama a tu esposa como a algo de gran valor (1ª Pedro 3:7)
Aunque el esposo cristiano es el líder de su esposa, no es su amo ni ella su esclava. Más bien, él ama y sirve a su esposa, así como Jesucristo (cp. Filipenses 2:5; Juan 13:13–14). El esposo cristiano vive con su esposa sabiamente (3:7), aprendiendo cómo ella piensa y qué necesita. Cuida de ella como prioridad en su vida, poniendo sus necesidades y deseos por encima de los suyos. Le honra a ella “como a vaso más frágil”. No es que ella es débil, sino que la responsabilidad del esposo es proteger a su esposa en honor y amor como algo de gran valor.
Mi hermano en Cristo, tienes la bendición inestimable de no solamente conocer el evangelio, sino de predicar el mismo evangelio a tu esposa cada día. Al amar a tu esposa como Jesús ama a la iglesia, te recuerdas a ti mismo, a tu esposa y a todos los que te ven, como Jesús amó a su iglesia y se entregó por ella.
¿Qué tal si mi esposa no responde?
El mandato de Dios a amar a tu esposa es absoluto. No depende de que ella se someta a ti, te respete o ame. De hecho, el amor de un esposo cristiano refleja más el amor de Jesucristo cuando su esposa no lo merece (Romanos 5:8).
Tu matrimonio predica el evangelio
- ¿Qué evangelio predicas si abandonas a tu esposa (física o prácticamente)?
- ¿Qué evangelio predicas si eres infiel con tu esposa?
- ¿Qué evangelio predicas cuando eres duro o áspero con tu esposa?
- ¿Qué evangelio predicas cuando no quieres perdonar a tu esposa?
Tus prioridades
- ¿Cuál es tu primera responsabilidad como esposo cristiano hacia tu esposa?
- ¿Cómo se diferencia de lo que nuestra cultura identifica como responsabilidad del esposo?
- ¿Por qué son distintas esas prioridades?
Tu liderazgo
- ¿Cómo se diferencia la definición bíblica de un líder con lo que dice el mundo hoy en día?
- ¿Quién es el ejemplo perfecto de un líder?
- ¿Cómo demostraba su liderazgo?

