Hebreos 5–7
En estos capítulos de Hebreos el autor argumenta que Jesús es superior a los sacerdotes de la tribu de Leví y todo sacerdote humano. Quiere que consideremos a Jesús—es un sacerdote perfecto (porque nunca pecó) y es un sacerdote eterno (porque siempre vive). Si rechazásemos a este gran sumo sacerdote, ¿qué esperanza habría para nosotros? Por eso, debemos perseverar en la fe en Jesús.
OBJECIÓN: ¿Es Jesús un sacerdote genuino (5:1–10)?
ADVERTENCIA: Dejando de seguir a Jesús sería catastrófico (5:11–6:12).
EXHORTACIÓN: Confiemos en Dios porque es fiel con sus promesas (6:13–20).
HECHO: Jesucristo es superior a Abraham, el padre de Israel (7:1–10).
HECHO: Jesucristo es superior a todos los sacerdotes de Leví (7:11–28).
Este pasaje nos lleva a considerar a Jesús, el gran sumo sacerdote que nos representa perfectamente delante de Dios para siempre y nos brinda algunas preguntas:
- ¿En qué sentido fueron oídas las súplicas de Jesús?
- ¿Por qué era importante que Jesucristo Traspasara el Velo?
- ¿Por qué menciona el autor los dos significados del nombre de Melquisedec?
- ¿Hay otro sacerdote que nos pueda representar Mejor que Jesucristo?