La disciplina de la iglesia – ministrando a los no arrepentidos

En nuestro tercer estudio en la serie acerca de la disciplina de la iglesia, me gustaría ayudarnos pensar en el tema del arrepentimiento.

1a Corintios 5 nos enseña sobre los propósitos de la disciplina de la iglesia y varios principios sobre cómo debemos ministrar a los miembros que no se arrepienten de su pecado. 1a Corintios 5 es de mucha ayuda para discernir los propósitos de la disciplina de la iglesia. Podemos observar por lo menos cinco.

1. La disciplina tiene como objetivo revelar. v. 1-2
2. La disciplina tiene como objetivo advertir. v. 5
3. La disciplina tiene como objetivo salvar. v. 5
4. La disciplina tiene como objetivo proteger. vv.6-8
5. La disciplina tiene como objetivo presentar un buen testimonio para Jesús.

El punto de partida debe ser un sano entendimiento de quién es Dios y la iglesia. Recordemos los fundamentos teológicos que ya hemos mencionado. La iglesia en Corinto tenía una incorrecta visión de la santidad de Dios. Por lo que ellos no actuaban honrando a Dios en la iglesia. El resultado fue que no solo había pecado en miembros individuales, sino que la iglesia completa estaba pecando también.