En nuestra serie, he tratado de animarnos a ser capaces de responder a la pregunta, ¿Qué es una cosmovisión? Una cosmovisión es nuestra forma de ver la vida. Es el marco de nuestra creencia básica acerca de todas las cosas. Es la clave sobre lo que giran todos nuestros pensamientos, decisiones y acciones.
Las cosmovisiones tienen una forma de chocar entre sí todos los días en todos los niveles de nuestra vida diaria. Es importante que los cristianos tengan una cosmovisión bíblica. La razón por la que los miembros de la iglesia no logran evangelizar y tener una influencia transformadora en nuestra cultura es que no conocen ni viven una cosmovisión basada en la Biblia y que glorifique a Dios.
Una cosmovisión bíblica nos ayuda a entender cuatro conceptos grandes que tienen numerosas implicaciones bajo cada concepto. La Creación, La Caída, La Gracia y La Gloria.
1. En la Creación: Dios creó a la humanidad a su imagen para que pudiéramos tener una relación con Él y nos puso en el mundo para gobernarlo (Génesis 1:27-29, 2:15).
2. En la Caída: Pecamos contra Dios, sometiéndonos a nosotros mismos y al mundo y la muerte (Génesis 3, Romanos 8:22).
3. En la Gracia: Dios envió a Su hijo, Jesús, Dios encarnado, al mundo y se sacrificó a sí mismo para pagar el castigo por el pecado (Juan 3:16, 2 Corintios 5:21).
Tener una cosmovisión bíblica puede describirse como tener una visión trifocal. Mirando cualquier situación, problema o área en nuestras vidas a través de los lentes de la creación, la caída y la gracia, podemos percibir y comprender a nuestro Dios Creador, Su mundo creado, pero ahora caído, y aún más importante, Su plan de redención a través de Su Hijo, el cordero, el Hijo de David, el Mesías, Jesucristo.
Esta mañana quisiera examinar el último punto, la Gloria, con un poco más de profundidad y ayudarnos a concluir nuestra serie.
Nuestro mundo es pecaminoso. Vivimos en una sociedad donde (supuestamente) nadie es responsable por lo que hace, pero, de alguna manera, todos somos responsables por lo que hace otra persona. Las personas sin Cristo viven con miedo, esclavos del pecado y sin propósito en sus vidas. Se preguntan ¿qué pasará en el futuro? Viven sus vidas con el lente de su cosmovisión que no les da respuestas adecuadas. Todo es incierto. ¿Cómo nos ayuda una cosmovisión bíblica a conocer, comprender y aceptar lo que viene en el futuro?
Como discípulos de Cristo, sabemos que el pecado y este mundo caído no tienen la última palabra, porque vivimos en la esperanza de una gloria venidera. Dios está haciendo lo que a veces parece ser una obra lenta de gracia en el mundo. Solo vemos destellos de la gloria que está esperando ser revelada. Estamos bajo la gracia, pero aún no en la gloria.
La Biblia dice que cuando muramos, entraremos en la presencia de Dios (2a Cor 5:8). Esta es una pregunta importante para cualquier cosmovisión. ¿Qué pasa cuando muero yo? ¿Hay vida después de la muerte?
El hinduismo dice que nos reencarnamos como una forma de vida diferente.
El panteísmo dice que nos hacemos uno con el universo.
El naturalismo (o la evolución) dice que simplemente nos extinguimos.
Como resultado, muchas personas viven solo el momento, pensando poco en su destino eterno. Pero la Biblia dice que la muerte no es el fin. Sí, nuestro cuerpo se vuelve polvo (como resultado de la maldición de Dios contra nuestro pecado – Gén. 3:19), pero nuestra alma regresa a su Creador.
La Biblia dice que sabemos que algún día Jesús vendrá de nuevo.
2a Pedro 3:7, 10 “pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos. Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.”
La Biblia también enseña que sabemos que cuando Jesús regrese, vendrá como el Juez del juicio final. De acuerdo con la justicia perfecta de Dios, él juzgará todos los errores cometidos. Romanos 2:16 “en el día en que Dios juzgará por Jesucristo los secretos de los hombres.”
Para aquellos que mueren sin Cristo, es decir, aquellos que lo han rechazado en su rebelión pecaminosa, y sin acudir a Él en fe y arrepentimiento, el juicio traerá condenación. Porque los que han confiado en Cristo y se han arrepentido de sus pecados serán salvos sobre la base de la justicia perfecta de Jesucristo. Todo esto será para la gloria de Dios. Jesús volverá al final de los tiempos, “cuando venga en aquel día para ser glorificado en sus santos y ser admirado en todos los que creyeron.” 2a Tes. 1:10
Solo entonces el mundo será todo lo que Dios quiere que sea, y solo entonces nos convertiremos en todo lo que Dios quiere que seamos. Esta es la meta por la cual Dios ha estado trabajando desde la eternidad pasada. No sólo todas las cosas son de Dios, sino que también son para Dios, para su gloria en Cristo.
Esta meta fue frustrada por la caída, pero Dios no ha dejado de trabajar para lograrla, y al final la alcanzará. Si Jesús va a reinar, sobre todo, entonces la salvación debe ser algo mucho más grande que simplemente mi propia entrada a la vida eterna. Isaías 65: 17-18 “Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra; y de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento. Mas os gozaréis y os alegraréis para siempre en las cosas que yo he creado; porque he aquí que yo traigo a Jerusalén alegría, y a su pueblo gozo.” (vea también Apoc. 21:1)
La historia del mundo comenzó en un jardín, pero terminará en una ciudad. La ciudad de la Nueva Jerusalén. Así es como Juan lo describe: “Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero. En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones.” Apoc 22:1-2
La vida de ese último y futuro mundo no estará desconectada de nuestra experiencia presente, sino que será su culminación y consumación. Es la creación perdida y caída la que Dios restaurará, renovará y redimirá.
Esta gloria futura traerá la glorificación de nuestros cuerpos. Fil 3:20-21 “Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas.” En cuerpos resucitados y glorificados como el cuerpo de resurrección del mismo Jesús, disfrutaremos de la vida de resurrección en cuerpo y alma.
Lo más importante de nuestro destino eterno es Dios mismo y la adoración a Dios. Apoc. 5:11-13 “Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono, y de los seres vivientes, y de los ancianos; y su número era millones de millones, que decían a gran voz: El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza. Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.”
Este fue el propósito de Dios desde el principio. Por eso creó todas las cosas, y por eso nos está redimiendo de nuestra condición perdida y caída. El universo creado de Cristo y por Cristo es también para Cristo, para que él reciba toda la gloria que sólo él merece. La cosmovisión bíblica termina con una alabanza eterna a nuestro Creador.
Entonces, ¿qué diferencia produce el conocimiento de todas estas cosas? Solo con una comprensión bíblica de la gloria futura de Dios podemos comprender mejor nuestras bendiciones actuales de vida en el Evangelio de Jesucristo. La cosmovisión bíblica de la gloria nos permite ver todo en el mundo en su verdadera perspectiva. En todo el dolor de nuestro mundo caído, no nos desesperamos, pero por la gracia de Dios que es nuestra en Jesucristo y en la esperanza de la gloria, podemos servirle juntos en y a través de Su novia, la iglesia local.
¿Entiendes el propósito para el cual fuiste creado?
¿Tienes una visión centrada en Cristo de todas las cosas?
¿Entiendes tu llamado a glorificar al Dios en cada área de tu vida?
Tener la cosmovisión correcta hace la diferencia en el mundo y para la eternidad. Nos ayuda a comprender el propósito por el cual Dios creó el mundo y todo lo que hay en él. Da una verdadera perspectiva sobre la dificultad diaria de la vida en un mundo caído. Y finalmente, ofrece la esperanza de una realidad futura que moldea todo en nuestra existencia presente.
Llevando todo esto a un nivel bien práctico…una cosmovisión bíblica correcta de la creación, la caída, la gracia de Dios y la gloria futura de Dios deberían transformar la forma en que vemos la vida y cómo vivimos nuestras vidas.
¿Tienes dudas acerca de tu relación con Cristo, tu creador? Te ruego que te arrepientas de tus pecados y confíes solo en él. Se acerca el día del juicio. 2ª Cor. 6:2 “He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.”
¿Tienes dudas acerca de tu actitud y relación actual con la novia de Cristo, la iglesia local? Te ruego que obedezcas y sigas “el plan A de Dios” para tu edificación espiritual y para la participación en la gran comisión a través de la iglesia local. Jesús está edificando su iglesia (Mt. 16:18) pero los obreros son pocos (Mt. 9:37).
¿Tienes dudas acerca de la importancia de compartir a Cristo con los demás? Te ruego que recuerdes la caída, el problema del pecado y la gran necesidad de que los demás confíen solo en Cristo. ¿Por qué no querrías compartir a Cristo con otros? Él ha hecho tanto por nosotros. Debes querer que otros experimenten la misma transformación, la misma gracia, las mismas bendiciones espirituales (Efesios), el mismo gozo, la misma esperanza, el mismo perdón de los pecados.
¿Tienes una lucha de vivir tu fe en el hogar, en el trabajo o en la sociedad? Te ruego que glorifiques a Dios en TODAS las cosas y en TODAS las áreas de tu vida. Dios lo exige y lo merece. Dios mediante, el próximo año los ancianos van a enseñar una serie sobre las implicaciones del Evangelio en áreas específicas de nuestras vidas. Estas áreas pueden incluir: mis finanzas, mis relaciones, mi trabajo, mi descanso, mis conflictos, mi tiempo, mis decisiones, y mis sentimientos.
¿Tienes dudas acerca del sufrimiento actual que estás experimentando? El cáncer que tienes o podrías tener. La enfermedad y el dolor que experimentas. ¿Tienes dudas acerca de lo que está por venir? Te ruego que glorifiques a Dios a través de tu cáncer, a través de tu enfermedad y en medio de tu dolor. Te ruego querida hermana, querido hermano, que mueras bien. Muere para la gloria de Dios. Él merece tu obediencia hasta tu último respiro.
♫ No es muerte el morir, dejar el mundo atroz
Y con los santos ya vivir en GLORIA junto a Dios.
No es muerte el cerrar los ojos por dolor
Y al despertar ver al Creador, quitando el temor. ♫
Si entiendo la perspectiva de Dios sobre por qué hizo todas las cosas (La Creación), qué salió mal con ella (La Caída), cómo puede encontrar su redención en Jesucristo (La Gracia), y cómo será al final (La Gloria), me da ánimo, gozo, esperanza, pasión y una intencionalidad para evangelizar y hacer discípulos hoy, mañana y hasta que nuestro Salvador regrese.
Para concluir, me gustaría desafiar tu corazón y tu alma hoy con una oración diaria de un cristiano con una cosmovisión bíblica.
Preguntas de repaso y aplicación:
1. Según el estudio, ¿qué es una cosmovisión?
2. Según el estudio, ¿Cuáles son los cuatro puntos principales que forman una cosmovisión bíblica?
3. ¿Puedes dar dos implicaciones prácticas de cada uno de estos cuatro puntos que forman una cosmovisión bíblica?
La Creación –
La Caída –
La Gracia –
La Gloria –
4. ¿Puedes pensar en otros versículos de la Biblia que expliquen más sobre la venida del Señor y su gloria futura?
5. Considera los siguientes asuntos o temas en nuestra sociedad actual. Si estuvieras en una conversación con alguien sobre cada uno de estos temas y te preguntaran qué crees sobre ellos, ¿qué dirías? ¿Qué versículos bíblicos te vienen a la mente? ¿Cómo los usarías para responder?
El sufrimiento / Las enfermedades / El cáncer –
La muerte –
El día del juicio –
El infierno / El purgatorio / El cielo / El Nirvana –
6. Cada aspecto de la sociedad nos confronta con valores e ideas que se contrastan con una cosmovisión bíblica. ¿Cuáles son algunas preguntas, dudas o temas que tienes acerca del tema de La Gloria? ¿Estarías dispuesto a pedir ayuda a tus pastores? ¿Estarías dispuesto a estudiar estas cosas con otros miembros de la iglesia en tus tiempos de discipulado?
7. Lee 1ª Tes. 4 y Apocalipsis 21 y 22 esta semana y medita en la gloria de Dios y la venida de Jesucristo.